La semana pasada no pude trasmitir el video en vivo. Sucedieron esas cosas que te hacen pensar: “ay, por qué pasa eso”. Me quedé sin internet, dos días en la semana y la agenda se movió todita.

Cuando nos suceden situaciones difíciles a veces pensamos que es algo malo, pero debemos dejar que el tiempo nos muestre la razón. Esta no fue una situación crítica ni difícil, pero tenía que haber una razón.

Como no transmití el video, tampoco quería subir la meditación que estaba relacionada a ese tema. Entonces llegó el viernes y me di cuenta de que no tenía nada para el boletín.

Pensando qué hacer, llegué a un podcast entrevista y pensé: qué bonito sería contar una historia real de Sé feliz, pero tengo testimoniales por escrito, pero ningún audio.

Entonces, le escribí a Silvia, quien forma parte de la comunidad hace más de un año, para preguntarle si quería contar su historia. 

¡Y sucedió! Su historia es real, sus audios son espontáneos, enviados por whastapp y son la muestra de una alineación perfecta, de lo que es pensar, sentir y ser. 

Esta es su historia

Todas tenemos dolores, no físicos, sino emocionales, tenemos decepciones, no sabemos cómo manejar las situaciones que nos pasan, buscamos tener el control sobre nuestros pensamientos y emociones y queremos sentirnos más felices con nosotras mismas y es posible lograrlo.

Ha sido muy motivador escucharla y es un honor acompañarla en su camino. 

Y entonces, encontré la razón. Todo lo que sucedió fue para que se diera esta posibilidad, para que conozcan la historia de Sil y en el Aniversario de Sé feliz y punto. Fue un mensaja del Universo, la sincronía bonita que aparece para mostrarnos el camino. 

No siempre lo malo es malo. Recuerda eso.

Si en este momento estás pasando por un momento de dolor y quieres aprender a ser feliz, aquí tienes una opción en tu vida.